28.01.2011 Hola pichones. Qué flipante hoy. Poco antes de irnos a medio día ha llegado una urgencia: una perrita atropellada. VIctor estaba ahí y nos hemos puesto todos en marcha. Él con el perro y nosotros alrededor intentando ser la mejor ayuda posible. No teníamos ni puta idea de qué teníamos que hacer. Lo que sí que veía es uqe a todos nos daba miedo estar en medio e interrumpir (a la vez de querer hacer lo más útil posible, repito). Hemos puesto una vía, valium y ketamina (más dezametasona). Hemos ido a quirófano y victor le ha suturado la femoral, que le sangraba casi a borbotones mientras yo le sujetaba la pierna, Guasi la auscultaba, y Vane y Leo hacían algo (o no, no estaba pendiente de ellos). Victor cortó la hemorragia y medio cerró y puso un vendaje. Salió a hablar con los dueños y nos dimos cuenta de uqe la perrita no respiraba. Ahí empezó todo… Os lo ahorraré (lo siento, pero me está estresando un taladro que no deja de sonar en mi vecindario). Nos ha dejado solos a los cuatro (vaaaale, un montón de gente, pero no tenemos ni idea de qué hacer en estas situaciones!) y no hemos sabido reaccionar. Hemos intubado, aunque no sabemos si mal (os lo ahorro, también) y visto que los latidos se deformaban. Adrenalina? Atropina? Estimulador de la respiración? No sabíamos qué hacer, qué poner, cuánto poner… La perrita murió en 3 minutos (o menos) largos. Victor nos echó una charla que bien podría ser motivo de dejar la carrera (a parte de lo que os comenté el otro día, a lo que luego me dedicaré a explicar). A mí me la sudó (su charla, no la pobre muerta), pero menudo hijo de puta me pareció. Y muy mal jefe. No nos explicó qué había que hacer o cómo estar preparados si vuelve a pasar. En vez de eso nos dejó en cara lo inútiles que éramos. Cágate. He hablado con guasi y hemos tenido una charlita autoreconciliadora para animarnos un poco. Hemos dicho que ya lo estudiamos este finde (de camino a Las Palmas, que a lo mejor vamos las dos; o en un barcito en Alcalá).
Ahora, a parte, os hablaré de mi enésima crisis de dejar la vet. Mar, no es poruqe tenga que estudiar mucho, efectivamente, me gsuta estudiar, el caso es que me gustaría tener una base donde colocar los conocimientos nuevos aprendidos (la base que tengo de los 5 años de carrera es minimísima) y me frusta mucho ver todo lo que me falta y lo que me cuesta retener; que me estudio respiratorio y se me olvida hígado; me miro cardíaco y se me olvida piel (qué decir ahora de las urgencias! Un mundo a parte!). [Estoy con los documentales de fondo y están ponienod uno de cerveza too interesante!]. Me estresa que haya tantas cosas que no sé y se me olvidan, no me sienot capaz de aprender todo lo que tengo que aprender. Soy demasiado impaciente para darle (darme) tiempo. [Ño! Este documental es buenísimo!]. No queiro trabajar en esto. No, no… Lo que sí puedo decir es uqe me quedo con lo que me has dicho, Krisi. Necesito pasta, necesito experiencia, las islas me encantan y gano increíblemente bien.
Por cierto, QUIERO SEGUIR VIAJANDO! Claro que sí! El caso es… que no sola.
No sé si alguno estará pensando lo mismo que yo… pero… sí. Por supuesto. Este finde pasado estuve con guille y con luca. Genial. El domingo vinieron unos Cs a casa y no sabemos hasta cuándo se van a quedar. Ella es española y él francés, majetes. Vivimos todos en paz. Me limpian los platos, me hacen muchas veces la comidita y hasta me dejaron una vez un cartelito (ya sabéis cómo me gustan los cartelitos!) encima de una olla con lentejas hechas con amor. Tengo la notita pegada en la nevera con el imán de “mi cachorro dígame”. Este día de hoy he tenido un bajoncillo raro (será por eso que vuelvo a escribiros?). No sé si ha sido todo a partir de un perrito que no he estado nada segura de cómo tratar. A partir de ahí he caído empicado. Me he puesto a estudiar mil cosas y me he vuelto a dar cuenta de lo poco que sé, de lo tantísimo que tardo en aprenderme nada y de las pocas ganas que tengo de seguir en este mundo que apenas empiezo a caminar. No quiero ser vet. Os lo he dicho ya? Quiero viajar y ser feliz. Sí que es verdad que echo de menos esos abrazos y mimos. Además. Quiero viajar y plantar coral. Cuando me compré las sabanas (Dios quiera apartarme del mal camino de aceros recordar), vino un hombre de tinta plasmado en los cartones que las contenían. Ahora el tipo sonríe en mi salón, mirándome hacia el sofá, al lado de la tele. No creo que sea capaz de arreglarme la cisterna, sin embargo. Habéis tenido la sensación alguna vez aquella de querer estar tan drogados de no daros cuenta de nada? A mí me pasa demasiadas veces, por jeemplo, ahora mismo. No queiro dormir. Y como sé que la felicidad está donde yo la busque, me voy a la cama…que mañana será otro día.
Me parece una locura todo lo que está sucediendo con las inundaciones. Australia, Brasil, la calima de las islas, de la península. Los mandatos, las barras de pan tunecinas. Los aviones sin piloto portadores de misiles, Taiwan y sus luchas con China. Kosovo. Las centrales mareomotrices, los tés rojos y los masters.
No me da, mi cabeza no me da. No me da lo suficiente como para comprender toda esta información externa. Si además contamos con que tengo las tetas más sensibles (información interna, quiero decir)…
19.01.2011
Ayer estaba mirándome un libro de Dx por imagen y la dedicatoria estaba escrita para los muertos del 11S. Casi me pongo a llorar y todo. Cada día soy más yo.
He soñado con zombies en NZ. Qué os parece? Espero que el próximo sueño sea en Suecia. Ya sabes, babe.
Siento mucho haber mandado virus por el Hotmail. Supongo que algo se ha colado desde el ordena del ciber. Sabéis cómo puedo quitarlo? No me deja siquiera mandar mails porque dice que “hay un límite de correos al día”. Cágate! Espero que no os hayáis infectado :(.
Tengoq eu aprender a aprovechar lo que tengo. Estaba pensadno (después de haberme despertado terriblemente llena de estómago y caída (y vacía) de espíritu e ilusión) en que quiero volver a irme a Indonesia. Y me autorregaño. Estoy aquí en Tenerife, en un pueblo superbonito, con un paisaje y un clima maravillosos y lo único que se me ocurre es huir, de nuevo.
Le he dicho a Jake que haga lo que le de la gana.
Cuando luca estuvo aquí, ambos dos coincidimos en la necesidad de tener a alguien cerca. Le dije: Quiero un novio que me quiera YA! Y él sólo se reía. Le dije que no quiero esfuerzos de ningún tipo, que no me uqiero entretener conociendo a nadie, que sólo queiro que me cuiden. Y se reía mucho y mucho. Y me decía que él también, pero que las cosas no funcionan así.
Hoy, me siento vacía. Vaciada.
No me apetece escribiros más. Hasta otro día.
Y es después de comer. Mucho mejor ahora. No sé de dónde, pero a la mañana he tomado fuerzas de algún lugar escondido y me he ido a tomar un cafelito al laico de la playa. Con mi libro y uno de mis cuadernitos. Me ha sentado genial. Luego una charla con una genial amiga y a currar (mas otra llamada con un pedazo de amigo de tb alto calibre).
Ayer Victor me dijo que, oficialmente, empezaba a trabajar. Así que ya estoy medio pasando consulta sola… Hoy solo he tenido una vacunita :D! El resto de la mañana hemos estado con una cesárea de un presa canario y sus crías. Se ha hecho una semanita antes del supuesto parto: tenía un prolapso de útero a considerar. La madre es una mierda de madre. Tuvo ya dos camadas: a la primera se los comió a todos, en dos tantas. La segunda dicen que la cuidó bien. A estos no les ha hecho ni puto caso. Dos han muerto, por ahora (uno con una hernia y paladar hendido y otro con paladar hendido, poer que aú no era perro ni nada (casi se le confundía por un bebé humano bastante feo), demasiado chiquitín). Hay otro con hernia, que hemos suturado, pero no sabemos si se quedó con algo de hemorragia interna (¬¬); otro de ellos es tb muy muy canijo y otro tiene una de las patas sin piel. Menudo panorama…. Le hemos estado frontando y estimulando respiración y todas esas cosas y a la hora de dárselos a la mamá, ella a penas los ha mirado. Me da meido volverme ahora a la clínica…
Me los quería quedar a todos y los cuidaría con bibe. Por cierto, los más grandes de ellos (los más fuertes) eran igualitos a Rumbita. Así que he decidido que probablemente la nena tuviera no más que un día cuanod me la trajeron a la clínica. Eran copias de ella. Una, la más fuerte, era la única que lloraba, y se me ha enternecido el corazoncito: era como tener a rumba de canija de nuevo…
Esta noche he quedado con Luca para ir, después de sendos curros, a Adeje, un pueblo de aquí cerca que empieza hoy con fiestas (y acaba mañana!). Se lo he comentado a Leo, el vet de mi curro, y me ha dicho que se apunta, y que él tiene coche (aunque no cartet!) y que vamos en coche en vez de en guagua! Luego se lo diré tb a Guasi (la otra vet) y a Vane (la vet nurse), por si se quieren apuntar. Este finde viene Guille. Tengo ganas.
Estoy en Tenerife (TF)! Ya me voy asentando, poco a poco. Estoy más feliz ahora que los días anteriores porque como no estoy contratada aún (primero me tengo que colegiar en el colegio de veterinarios de canarias, que tardaré como una semana), mi jefe me ha dicho que es mejor que no me pase por la clínica por si hubiera algún problema o una inspección de trabajo. Así que hoy me he ido al pueblo de al lado, me he hecho uno de los papeles necesarios para colegiarme (el empadronamiento) y me he quedado desayunando en una terracita de ese mismo pueblo (San Juan). He escrito (ahora luego, si me veo con ganas (aunque me forzaré un poquillo a ello) os lo trascribo al ordena) mientras tomaba el desayuno, he ido a una escuela de buceo que no abría nunca, he hablado con una tipa muy maja del centro de información turística (casi tengo una cita de volver a ir a verla la semana que viene!) y me he vuelto andando, por el paseíto de calas de rocas (aunque a la mitad final he tenido que pasear por la carretera).
Os trascribo (con algún que otro cambio en el lenguaje) cosas desde el día 12, aunque no todo!
“12 enero” Para llegar a Alcalá debía de coger 2 guaguas. La primera de ella la esperé y la tomé con un tipo de Santander (o me dijo San Sebastián?); tendría unos 55 años (me dijo cuántos, pero ya no me acuerdo) y estaba prejubilado por algún accidente que tuvo. Se dedicaba un poco a recorrer mundo (más uqe nada España y Berlín), con su mochila, alquilando bicis o coches y durmiendo dentro de ellos. Viajando barato. Este señor, del cual no tengo idea posible de su nombre, me despertó algo que ya surgió en mí desde hace un tiempo largo (no sé muy bien cuándo, pero ahora que lo pienso también tuve este flashback en algún punto de mi viaje a indonesia/timor). La gente que vive así, viajando sin rumbo, está increíblemente sola; no profundizan en relaciones, hablan con todos pero no mantienen el contacto con nadie, pierden las ganas de conocer profundamente a la gente y, al perder esto, pierden el conocer mundo.
Sólo de pasada este tipo me comentó su solitud y me parece que fue en ese momento cunaod me vino a la memoria mi viaje en solitario por indonesia; cómo estaba cada día en un pueblo o ciudad nuevos, cómo conocía a gente (ya fueran locales o también viajeros) para no tener más que un recuerdo vago de su existencia días más tarde, cómo me sentía surfeando el mundo, sólo por arriba, sin percatarme de todo lo que dejaba bajo mis pies, de las maravillas del subsuelo (ay! Dostoievski, dónde has quedado en mi vida pasada…). Estoy confusa… Eso es viajar, ir moviéndose, y me encanta… sin embargo, recuerdo el vacío extraño que quedaba en mí después de unos días vagando… Me viene a la mente la idea de lo que me gustaría aquella persona que camine paralela conmigo, con quien yo camine en paralelo. Estoy harta de cruzarme con líneas que sólo me signifiquen puntos momentáneos. Quiero una paralelancia perfecta. A ver, que me voy por las ramas…
Viajar no son sólo montañas, playas o edificios que puedas ver, sino también las experiencias que vivas, a gente a tu alrededor, los sentimientos nuevos de amistad y confianza; el echar de menos lo conocido y anhelar lo desconocido…
Yo no quiero acabar así, sin nadie a quien querer, sin buscar nada más que seguir adelante, sin motivo, sin motor.
“13 de enero” (esto no iba dirigido a vosotros, pero como voy a contaros lo mismo, pero con otro estilo, aquí lo dejo).Ya estoy echando de menos a Ana, mi antigua jefa… Sé que acabo de empezar, pero Victor no me gusta tanto. Habla más bien poco, casi ni te mira, y es muy serio con los empleados en la clínica. Somos 4 vets y una ATV. Dice que no sabe si echar a los otros dos veterinarios y pillar a gente nueva. A mi me ha dicho que soy su “gran esperanza”. Los otros dos son un poco dejadillos (sobre todo el chico). Llevan ya aquí uno un año y la otra 7 meses. Victor no los trata muy bien… eso no me gusta nada y no me lo puedo quitar de la cabeza. ¿cómo es que no sabes hacer eso? ¿Por qué no has hecho lo otro ya? Tipo así… Yo me digo a mí misma que el tipo debe de estar ya quemado porque lleva mucho tiempo con ellos,pero no puedo dejar de pensar cómo voy a reaccionar yo si me hace una de esas… Aguanto tan poco! Pienso que me va a servir para “tragar” más.
Por ahora (ayer y hoy) estoy en la clínica como si no existiera. Sigo a uno, luego sigo a otro… Voy a empezar muy poco a poco, desde lo bajito. Pero tb me da que no tengo mucha más paciencia como para seguir de “interna”; mirando, limpiando y cargando. Mucha paciencia es lo que necesito.
Sin embargo, es salir de la clínica y ver el maravilloso día que hace, el color de las islas reflejado en cada objeto, el olor del mar a la vuelta de la esquina… Se me forma la sonrisa sola en la cara!
Ahora ya tengo casa. Ayer estuve llamando y mirando unas cuantas y por fin me he decidido y llamado a la casera esta mañana. Es muy luminosa, tengo terracita (desde la que veo al Teide a la izquierda y al Mar a la derecha), una azotea superchula y dos habitaciones. La cocina es con barra americana, también tengo tele (en blanco y negro :S) y TDT y esos sofases que tan de moda están por estos parajes (qué feos son!). Cuando deshaga la maleta sacaré los pareítos que compré en Bali para ver si los peudo poner por encima, hasta que compre alguna tela apañada…
Ya del mismo día de hoy, os cuento:
He hablado con Luca, y resulta que este finde se viene a verme a Alcalá! Tengo tantas ganas! Viene el sábado en la tarde, cuando acabe de currar y tiene el coche de su jefe, que se lo ha dejado. Ya os contaré lo que hacemos…
Desde el barcito de San Juan: Puede que me esté volviendo loca de tanto estar sola. Bueno, loca, loca, no; pero sí más huraña, solitaria y en-mi-mismada que siempre. Creo que me estoy llenando de manías de mí, para mí, por mí. Estoy en una cafetería de San Juan y he venido a empadronarme para poder colegiarme. Veo a un montón de parejas (la mayoría extranjeros (ingleses o alemanes)) y muy poca gente sola. Yo estoy sola y me gusta sentarme aquí, con el solecito en mi cuerpo (qué mareo, se me ha subido el café!), mis cuatro libritos de pensar (ayer me compré otro para poner cosas de la clínica, pero me he dado cuenta de que no tenía solo tres, sino cinco; así que ahora ya tengo seis (aunque principalmente use tres (uno de los cuales está a punto de finiquitarse))), con mi mente perdida entre el mar y la montaña y con MI pensamiento de que me quedaría así toda mi vida.
Yo siempre me aburro mucho, pero me da la sensación de que, si estoy en la costa, mirando el mar y las olas, la arena o las rocas, soy incapaz de mantenerme aburrida (no confundir aburrimiento con sentimiento de inutilidad en la vida, deseos de desaparecer (que no de morir (voy mejorando!)), o falta de sentido o llena de vacío existencial). Me colma una paz casi infinita.
Estoy solita, muy solita. Y lo peor de todo es que, a pesar de lo que diga a veces, estoy bien así. Prefiero estar así.
Qué tonterías escribo? De vez en cuando desvarío (“Puede que me esté volviendo loca de tanto estar sola”).
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Desde la playita de mi pueblo: Estoy tumbada con La Gomera de frente. Esto es una locura; en bikini, en el mar, perdida en las olas…
Algo que me asusta un poco es mi falta de sensación de peligro. Veo calas, y rocas, y distancias algo lejanas donde no sé si debería meterme sola. A veces pinso que ya lo veré una vez esté de camino: si hay corriente, si veo que me cansé antes de llegar, si me veo rodeada de rocas a la altura de mis rodillas… No me apetece que me trague el mar adentro (ni al fondo). Me entraría el pánico y me cansaría muy pronto (de sólo pensarlo ya se me acelera el corazón).
Estoy en la gloria aquí tiradita… Creo que voy a intentar estudiar entre semana y tener los fines de semana para mi ocio y disfrute. Creo.
No quiero quedarme sin hacer nada en casa durante los fines de semana. Quiero hacer rutas, noches fuera, buceo…
Eso sí, echo de menos besar su espalda salada.
Me he dado cuenta de que estos “últimos” días no paro de decir que siento las cosas como por encima, que no me empapan. Creo que es muy acertado, y todos sabemos por “qué”.
Me gusta la fecha. Aunque no sé por qué me recuerda a que debería de hacer algún tipo de dieta…Jaja
Ayer al final no pude salir. El primer problema era la perrita, y quedó misteriosamente solucionado. Resulta que estaba pensando en patri, y patri en mí; así que la llamé, estuvimos hablando y me dijo que ella no pensaba salir en Nochevieja, sino quedarse en casa con Jesús y la family. Así que rápidamente le propuse hacer de babysitter (después de explicarle todo lo malo del tema) y ella aceptó :). Esa parte solucionada. El caso es que, a la que llegué a mi casa después de presenciar la casi muerte de la pobre chica, empecé a sentirme fatal, muy cansada, con mocos para no poder respirar y la tos in crecento. Efectiva y finalmente, me puse malita.
Recordáis toda esta semana de lo cansadita que estaba, la falta de energía y el desgaste que sentía? Pues me alegra saber que es debido a la enfermedad, y no a la anemia ni a la astenia.
Me parece gracioso lo rápido que respondió mi cuerpo. Debía de estar al borde y, en cuanto descansé de la pequeña perrita (de todos los líos de la última semana, también), fue cuando se me desplomó.
Esta mañana he ido a pasear al retiro. Me he tenido que sentar en un banquito a tomar el sol porque me costaba el cuerpo. Ha sido maravilloso. Hacía timepo que no disfrutaba tanto de la gente paseando a mi alrededor, del solecillo de invierno (en Almansa casi no existe :(), de mis hombros siendo acariciados con esa calidez que me conquista, del petirrojo y de la ardilla, de la paz de estar conmtigo. Me gusta esa palabra: conmtigo.
Me he llevado uno de mis libritos y me he puesto a escribir. También he leído el ppio, que coincide con el 1 de Julio de este año (que acaba de pasar!). Mis primeros días en el barco… qué recuerdos. A todo eso vosotros no tenéis ni habéis tenido acceso; pero en cuanto tenga teimpo quiero pasarlo al ordena, para entreteneros y que conozcáis. A mí me gusta leerlo.
Auch!
Papá: Esther, qué buscas.
Esther: La felicidad.
Papá: Está delante de tus narices!
Esther: El pan? Pues... la verdad es que me apetece...
He hablado con guasi y hemos tenido una charlita autoreconciliadora para animarnos un poco. Hemos dicho que ya lo estudiamos este finde (de camino a Las Palmas, que a lo mejor vamos las dos; o en un barcito en Alcalá).
